Nuestros queridos “asimilados”. En este año de nuestro vigésimo aniversario, no es infrecuente que echemos la vista atrás. Quizás hayáis visto que en los Estatutos de APREM el primero de nuestros fines es “Contribuir a que los niños y las niñas prematuros o asimilados se desarrollen, a lo largo de su infancia y adolescencia, de forma sana, equilibrada y alegre”.
Hoy queremos recordar a los primeros niños “asimilados” de APREM. Niños nacidos a término pero cuyos padres luchaban, como los de prematuros, por la vida de sus hijos en la UCIN. En un entorno de tal dureza, todos nos sentíamos una única familia, juntos fundamos APREM y por eso, esos niños asimilados forman parte de APREM por derecho propio.
Nuestros primeros y queridos asimilados fueron Martín y Pablo. Hoy Martín es un joven de 20 años, que está estudiando fuera de España, pero Pablo murió dos años después. Fue el momento más difícil que hemos vivido juntos, que se produjo, además, justo cuando el Parlamento había aprobado por unanimidad una propuesta presentada por APREM para mejorar la situación de las familias con hijos ingresados en las Unidades de Neonatología.
Aquí os dejo una carta hecha In Memoriam de Pablo. No solo es para mostrar que sigue en nuestro recuerdo sino para que las familias más jóvenes conozcan lo que era nuestra vida entonces; como veréis, aunque han pasado 18 años, lamentablemente algunos problemas siguen sin resolverse hoy.